HAMBURGO TIENE UN CIELO DE ALGODÓN




Retazos sueltos, madejas deshilachadas rodando sin parada, en un luminoso pálido intenso azul de un techo plano que parece abocinar
sobre mi cabeza; si elevo el brazo, puedo tocarlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tódo para el blog